¿Hay alguna diferencia entre establecer objetivos para tu equipo presencial y para tu plantilla remota? Ciertamente, hay familiaridades sorprendentes.
Por ejemplo, tanto si los empleados trabajan en la empresa como si lo hacen a distancia, es vital que los objetivos estén alineados de alguna manera con la visión y la misión más amplias de la empresa. Los empleados en un entorno físico o en sus oficinas en casa suelen estar más motivados para alcanzar objetivos cuando entienden cómo encajan sus esfuerzos en el crecimiento y el propósito de la empresa.
Por otro lado, como señala ZDNET, para algunos trabajadores remotos los objetivos anteriores "pueden dejar de ser relevantes si el paso al trabajo remoto ha cambiado las prioridades de la empresa o ha hecho inviables determinados proyectos en curso". Aconseja a tus directivos que profundicen en las conversaciones con estos empleados para abordar cualquier discrepancia.
Aquí tienes consejos para personalizar el proceso de fijación de objetivos con tu equipo remoto:
Reconocer las diferentes personalidades.
Cuando establezcas objetivos entre trabajadores remotos, recuerda que estos equipos "suelen ser diversos y estar distribuidos, lo que significa que pueden tener estilos de trabajo, preferencias y retos diferentes", señala LinkedIn. Obtendrás una respuesta más favorable cuando "evites imponer un enfoque único para todos".
Asegúrate de que los objetivos de los empleados son claros y específicos.
Las generalizaciones vagas sobre objetivos como "aumentar la retención de clientes", aunque valen la pena, no suelen funcionar con los empleados. Los objetivos deben ser lo más específicos posible, con plazos o metas claramente establecidos. Utilizar el método SMART (Específico, Medible, Alcanzable, Relevante y Limitado en el Tiempo) ayuda a los trabajadores a distancia a comprender mejor qué es lo que quieres que consigan en un plazo determinado.
Comunicar (y comunicar más)
El camino más seguro para establecer objetivos eficaces es la comunicación continua. Hay muchas herramientas a disposición del directivo (mensajes de texto, correo electrónico, vídeo, aplicaciones de chat, etc.), así que no hay excusa para no mantenerse en contacto con los trabajadores remotos. La comunicación también ayuda a facilitar los comentarios de los empleados, las ideas nuevas, el progreso hacia la consecución de un objetivo y otros asuntos relacionados. Es una forma de reconocer los esfuerzos individuales y de equipo y de modificar los objetivos a medida que cambian las circunstancias a lo largo del año.
Establecer objetivos compartidos.
Los objetivos individuales son cruciales, por supuesto, pero en muchos casos con trabajadores remotos, es una buena idea establecer objetivos compartidos. "Esta interdependencia ayuda a los equipos a sentirse conectados incluso cuando están separados", señala Culture Amp. Al mismo tiempo, en el caso de los empleados dispersos por distintas regiones y zonas horarias, "asegúrate de que su trabajo sea independiente para que no se sientan bloqueados por otros miembros del equipo o necesiten coordinarse fuera de su horario laboral habitual".
Programa controles periódicos.
La falta de compromiso y/o la sensación de aislamiento son habituales entre algunos trabajadores remotos y pueden mermar su eficacia y productividad. Para contrarrestarlo, supervisa el progreso de cada empleado hacia sus objetivos programando reuniones formales o informales con regularidad. Esto ayuda a mejorar el sentimiento de compromiso entre los trabajadores en un entorno remoto y es un gran método para detectar cualquier obstáculo o reto imprevisto.
Integra los planes de carrera individuales con la fijación de objetivos.
Al igual que los empleados presenciales, los trabajadores remotos suelen tener ambiciones de avanzar en su carrera dentro de la organización. Un método probado para mejorar el proceso de fijación de objetivos es destacar cómo los objetivos individuales apoyan los planes individuales de avance profesional de un empleado. Dedica tiempo a mantener una conversación en profundidad sobre dónde quiere estar el empleado dentro de un año, dentro de cinco años, etc.
Como hemos señalado antes, "los empleados quieren mejorar su rendimiento y sentirse más valorados por la organización". También les motiva creer "que la promoción profesional dentro de la empresa es una posibilidad real." Esto puede ayudar a impulsar un mayor compromiso y retención tanto para los empleados que trabajan presencialmente como para los que lo hacen a distancia.
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