Uno de los motores más importantes y eficaces del éxito del liderazgo empresarial es la intencionalidad. Para un empresario, la intencionalidad se refiere a tener un propósito claro, un plan bien definido y una infraestructura completa no sólo para dirigir la organización, sino también para crear una empresa próspera y una cultura empresarial floreciente. Muchos empresarios confunden los conceptos de dirigir y gestionar sus empresas. Pero en realidad se trata de objetivos diferentes, aunque interdependientes, que requieren esfuerzos muy distintos.
Saber cómo dirigir una empresa es sin duda crucial, ya que es el combustible que mantiene funcionando la máquina. ¿Pero el liderazgo empresarial? Eso sí que requiere algo que trasciende los planes, los procesos y los contratos.
La intencionalidad en el liderazgo empresarial incluye tener un propósito claro y una visión a largo plazo del futuro de la empresa. Los líderes intencionales están comprometidos con el desarrollo de los empleados, la mejora del bienestar general de su equipo y la creación de un entorno en el que las personas quieran dar lo mejor de sí mismas.
Es importante que los empresarios piensen más allá de su función operativa. La distinción es la diferencia entre ser un jefe que supervisa el negocio y ser un líder que fomenta e inspira el éxito en toda la empresa. ¿Qué prefiere ser?
Los líderes empresariales no nacen, se cultivan. Se trata de un viaje que requiere un compromiso con el desarrollo personal y profesional. Navegando intencionadamente en su ascenso hacia el verdadero liderazgo y pensando a un nivel más elevado y dinámico, los empresarios pueden transformarse en los líderes que desean llegar a ser.
Éstas son cinco acciones eficaces que puedes poner en práctica ahora para convertirte en un mejor líder empresarial.
1. Céntrate en el Autoconocimiento.
Ser consciente de uno mismo implica tener un conocimiento exhaustivo y basado en hechos de los propios puntos fuertes y débiles, así como la capacidad de reconocer el impacto que tienen las palabras y acciones de uno en quienes le rodean. La autoconciencia es fundamental para todo líder empresarial de éxito, pero también es algo difícil de cuantificar en nosotros mismos. Al fin y al cabo, la mayoría de las personas creen de verdad que ya poseen al menos cierto grado de autoconciencia.
Para mejorar tu autoconciencia, reserva un tiempo cada día para reflexionar sobre las interacciones que mantienes y las decisiones que tomas. Analiza los resultados y el impacto que tus elecciones y planteamientos pueden haber tenido en ellos. Considera tu conexión emocional con determinadas situaciones y cómo esas emociones pueden haber afectado no sólo a tus acciones y comportamientos, sino también a las reacciones que recibiste ante ellos. Considera la posibilidad de escribir un diario con tus pensamientos y reflexiones.
2. Dedícate al Aprendizaje Continuo.
La mejora del liderazgo comienza con un compromiso de aprendizaje continuo. Las oportunidades de aprendizaje exponen al liderazgo a nuevas ideas, innovaciones emergentes y lecciones del pasado. Una mente con hambre de aprendizaje aumenta casi automáticamente la capacidad de resolver problemas, elaborar estrategias y tomar decisiones importantes.
Considera la posibilidad de unirte a un consejo de empresarios, asistir a webinars sobre liderazgo y escuchar podcasts relevantes. Independientemente de dónde o cómo te eduques, haz del aprendizaje un objetivo constante y asegúrate de evaluarlo de una forma que tenga sentido para ti.
3. Mejora Tus Habilidades De Comunicación Efectiva.
En muchos sentidos, tus habilidades de comunicación son tu tarjeta de presentación. Como líder empresarial, es importante comunicar información y opiniones personales de forma clara, concisa y transparente. Una comunicación eficaz aumenta la productividad de la organización, mejora el compromiso de los empleados y facilita la confianza en toda la empresa.
Si deseas conocer formas ejecutables de mejorar tus habilidades de comunicación en el liderazgo empresarial, descárgate nuestro whitepaper gratuito titulado "Di Lo Que Quieres Decir": Cómo Mejorar Tus Habilidades Comunicativas Como Líder Empresarial".
4. Crea una Visión para Tu Negocio.
La visión de una empresa es mucho más que una simple declaración sobre dónde quieres ver el negocio dentro de cinco o diez años. Tu visión es una herramienta a largo plazo que, si se ejecuta eficazmente, guiará tu toma de decisiones, inspirará la acción y unirá a tu equipo ahora y en el futuro. Los grandes líderes empresariales aprecian el poder que una visión convincente de la empresa puede tener en su negocio y en las personas que lo integran.
Aunque pueda parecer contrario a la intuición, la visión de tu empresa debe empezar por una sólida visión personal. Según el Presidente y CEO de The Alternative Board Worldwide, Jason Zickerman, "Es mucho más probable que consigas la visión que quieres para tu empresa si está alineada con la visión que quieres para tu vida."
Haz clic aquí para leer el artículo de Jason titulado "El poder de tu propia visión personal" en Entrepreneur.com.
5. Lidera con el Ejemplo.
Como dueño de tu empresa, todos los ojos están puestos en ti. Lo digas o no, tu equipo analiza cada movimiento y decisión que tomas. Liderar con el ejemplo significa modelar el comportamiento propio de un líder empresarial, marcando la pauta para que los demás hagan lo mismo. Al encarnar las cualidades que espera de tu equipo, les inspiras para que sigan tu ejemplo.
Sé consciente de demostrar integridad y respeto en las interacciones que mantienes en toda tu organización. Incluso cuando te desafíen o te agredan, elige siempre mantener una conducta objetiva y receptiva ante los demás. Sé lo más transparente posible, incluso cuando tengas que tomar decisiones difíciles.
Para más información sobre cómo convertirse en un mejor líder en tu empresa, lee "La importancia de un plan de desarrollo del liderazgo."
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